Según un informe del Comando Espacial de Estados Unidos, el 1 de agosto los deshechos de un cohete chino caerán en Santa Fe. Jorge Coghlan, astrónomo vocacional y cofundador del Centro Observadores del Espacio (Code), brindó detalles de cómo sería este espectáculo visual.
El divulgador destacó que China evolucionó mucho en materia espacial en los últimos años. Sobre el evento que mantiene a todos los santafesinos expectantes, manifestó: “Es algo maravilloso porque son miles de fragmentos pequeños que se van desintegrando a una altura de entre 45 y 65 km más o menos”.
Debido a que el cohete está compuesto por diferentes metales, los colores también varían, por lo que se creará un espectáculo en el cielo. En el pasado, este hecho se pudo ver por casualidad y así se pudo comprobar la belleza de tal fenómeno.
Coghlan contó que la mayoría los cohetes eran incontrolables en este más medio siglo de era espacial. “A pesar de los miles de vehículos que se mandaron al espacio de todo tipo, en la historia de la astronáutica a una sola persona un pequeño fragmento le pegó hace algunos años en el hombro, sin originarle ningún daño”, reveló y explicó que un cohete nunca puede impactar contra la tierra porque nada de lo que viene del espacio entra en la atmósfera y llega entero. “Salvo que sea una nave para que justamente puede soportar los 2.500 º de temperatura con los astronautas adentros, como fueron siempre las capsulas”, agregó el investigador en diálogo con el diario Uno de Santa Fe.
“Cuando se trata de un cohete o de un satélite que no está conformado para eso, si cae algo, va a caer en forma de ceniza o fragmentos muy pequeños”, declaró el experto.
“Puede caer sobre Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Chile, sobre el Pacífico o el Atlántico”, abundó Coghlan. Esta gran variación del lugar de impacto según explicó se debe a que las órbitas de los cohetes chinos pasan a 41 o 42 º bajo o sobre el Ecuador, por lo que pasan sobre América del Sur, Europa, el norte de África y el norte de Asia. Por lo que la posibilidad de que el cohete llegue a Santa Fe es una especulación simplemente”.
Fuente: La Capital